El sindicato de Banco Ripley denunció que la empresa está tomando “resguardos” en caso de una eventual huelga por parte de los trabajadores que se encuentran en negociación colectiva.
El dirigente Denis Castro asegura que la empresa está haciendo ingresar a jefes de operaciones o supervisores de tiendas a la tesorería del Banco Ripley y a cajeros de la tienda a las cajas.
“Esto genera que en las cajas donde caben dos o tres personas hayan seis. Así no se puede respetar el distanciamiento social por el contagio del covid-19“, afirma.
“Nosotros dudamos de que la Superintendencia de Bancos autorice a personal que no es de la empresa a trabajar en una parte tan neurálgica como la tesorería, poder entrar a la bóveda del banco, poder ocupar el sistema y trabajar ahí”, agrega.
Según indica el dirigente, la maniobra de la empresa tiene dos objetivos. El primero de ellos es prepararse ante una eventual huelga por parte de las y los trabajadores. Mientras que el segundo es disponer de personal para atender al público mientras las tiendas están cerradas por la cuarentena.
“Son sorprendentes las argucias que utilizan para abrir un negocio que no pueden abrir y, por otro lado, tratar de protegerse de una huelga siendo que no pueden tener cajeros externos“, señala el dirigente.
“Esto lo hacen para causar inquietud en la gente, la idea es atemorizar a los trabajadores”, concluye.